No necesito el silencio para escribir
Para leer sí
Quizá no crea merecer tanta atención
Quizá los demás la necesiten
De día buena poesía y malas noticias
De noche lo que sea
En sueños logro leer del mar
Despierto la mar me queda lejos
Sigo en busca de esa frase
que hará que todo acabe
pero no la leo ni ya la espero
Y no es cierto que yo la pueda escribir
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Se dice que el poeta José Hierro se iba a una bolera a escribir. Allí, entre el ruido de los bolos, encontraba la tranquilidad necesaria para escribir.
Abrazos. Que encuentres esa frase.
Hasta pronto.
Este poema es un imán,
atrapa.
Gracias por ls ánimos (y la anécdota) Batania, pero no lo veo claro. Estaría bueno.
Me alegro de ejercer cierto magnetismo camino a Alfaro.
Un e-brazo, como dice mi Conde Olino, a los dos.
Lee menos poesía y más Céline, que la frase en cuestión, la muy puta, no se presenta, pero al menos te deleitas un rato entre tanto.
Mira si seré poeta que Céline me rima con Lardín.
Sí, es ciero, muy bueno!
El poema, como experiencia poética, la poesía como un estado del alma... Inalcanzable, por eso le damos tantas vueltas, Me ha gustado mucho, gracias. Es la primera vez que me atrevo a hacerte un comentario, y si me lo permites volveré.
Vuelva usted mañana, Leonardo, que aquí se admite de todo y a todo el mundo, y como muestra la siguiente entrada, que dedico al beato.