Murió Chanka

Extraído del blog de David González:

DESCANSA EN PAZ, CHANKA, AMIGO.

Me despierto, enciendo la luz y consulto la hora en mi móvil. Las siete menos cinco de la madrugada. Hay un mensaje. Es de Nieves. Lo abro y lo leo. Dos palabras: Murió Chanká. Quizá no estoy despierto y esto es solo una pesadilla. Vuelvo a leer el SMS: Murió Chanka. Llamo a Nieves de inmediato. Murió Chanka. Murió ayer a las ocho de la tarde. Cuelgo. Chanka se llamaba, en realidad, Juan Carlos Rodríguez, y por más que intento recordar su edad no lo consigo. Sé que era más joven que yo, unos años más joven. Y era un tío guapo, rubio, con unos hermosos ojos que siempre te sonreían. Y era un tío simpático. A veces, lo recuerdo como si le estuviera viendo, se subía la camiseta, se palpaba el vientre y te decía: ¿Viste, fíu? ¿Viste qué cuerpo? Ni un átomo de grasa. La forma en que lo decía era como una semilla que sembraba en nuestras caras una sonrisa. Murió Chanka. Murió una buena persona, siempre dispuesta a escucharte, siempre dispuesta a echarte un cable. Murió Chanka. Y yo, como todos sus amigos, como todos los que le conocimos, solo podemos hacer una cosa: llorarle. Murió Chanka. Y mi corazón está de luto. Y este blog está de luto. Y miro a través del cristal de la ventana y luce el sol. Pero incluso el sol está de luto. Porque como me escribió Nieves: Murió Chanka.
Publicado por David González, poeta en 7:58